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- Preludio de Hakom "El Pelirrojo"
Posted by : Yuki
jueves, 23 de julio de 2015
Hakom se adentró entre las sombras del callejón alejándose de miradas indiscretas.
Ni un alma se había aventurado a salir en medio de la tormenta de nieve y todos se refugiaban junto al fuego del hogar o el calor de una taberna, pero el semielfo tenía una deuda pendiente.
Movió una caja de madera y entro por un hueco en la pared de una casa abandonada donde faltaban algunos ladrillos, pocas personas sabían de ese acceso a la hermandad excepto las ratas, pero él era excepcional y conocía la ciudad como la palma de su mano.
La mujer miraba distraídamente la chimenea mientras amontonaba monedas y daba sorbos a una cerveza, al notar la presencia del semielfo a sus espaldas lo saludo sin volverse siquiera.
* Hola Pelirrojo, ¿has traído algo para mí?- sonrió.
* Reconoce que esta vez he estado cerca de sorprenderte Raven, no he hecho apenas ruido y podría haber sacado mi cuchillo y…
* Deja de soñar, aun no te han salido los dientes chico. Hablemos de negocios.. – la mujer saco un librito de su bolsillo y le miro impaciente.
* Ha sido un buen día, en el mercado había muchos pardillos que no vigilaban las bolsas y sus posesiones han caído casualmente en mis manos- Hakom saco una pequeña bolsa y empezó a apilar monedas frente a la mujer con gesto alegre.
* Ya veo….aquí hay unas 50 piezas de oro….-murmuró entre dientes
* ¿No es suficiente? Reconoce que para no tener dientes he sacado una buena tajada. ¿esto servirá?
* Me temo que no pelirrojo, en mi libro dice que aun te queda mucho por pagar…sigue trabajando como hasta ahora y en un par de años podrás saldar tu deuda con nosotros.
Hakom dio un puntapié contra el suelo. Si las cosas hubieran sido diferentes…ahora estaría trabajando para la hermandad y pudiendo quedarse gran parte del dinero y llega a convertirse en alguien importante.
El y su hermana gemela Shaina habían sido abandonados por su padre al nacer y dejados a cargo de una madre moribunda. Ella contaba que lo conocio en una taberna y al enterarse de que esperaba un hijo huyo como alma que lleva el diablo. Despreciada por su familia por tener en su vientre a un mestizo, su madre, Rosane fue arrojada a la calle en estado de buena esperanza y dio a luz entre mendigos a dos
gemelos pelirrojos con las orejas picudas, y desde ese dia no dudo en trabajar en cualquier trabajo por vergonzoso que fuese para mantener a su pequeña familia.
Los hermanos apenas tenían 8 inviernos cuando su madre enfermo y murió dejándolos solos en el mundo, y tuvieron que valerse por ellos mismos.
Shaina poseía una hermosa voz y se dedicaba a ayudar en una pequeña taberna, pero para Hakom aquello tan ordinario era demasiado aburrido. Cada dia trepaba por tejados y aflojaba alguna que otra bolsa para conseguir comida. Pero en lo que era realmente bueno era en escuchar sin ser visto u iodo, infiltrándose como una sombra y descubriendo increíbles secretos.
Cuando Hakom había cumplido los 14 se había convertido en todo un pilluelo y podía mantener a ambos con sus habilidades.
Quiso el destino que Shaina enfermase de lo mismo que había arrebatado la vida a su madre y las medicinas para sanarla eran demasiado caras.
Hakom tomó la decisión de adentrarse en el oscuro mundo de los callejones de la ciudad, donde trabajos de dudosa reputación podía conseguirle las monedas necesarias para ayudar a su única familia.
Fue así como conoció a Raven Redwinds, la cabecilla de la hermandad de ladrones de la ciudad. Cuando apareció ante su puerta todos los miembros de la hermandad le echaron a golpes, pero ella fue la única que se ofreció a pagar el tratamiento de su hermana a cambio de un intercambio de trabajos, un trato justo.
Si hubiera sabido que aquellas medicinas habrían llegado demasiado tiempo para salvar a Shaina y que vendería su libertad por ello, quizás lo habría pensado, pero el destino es cruel e imprevisible.
Tras la muerte de su hermana, la deuda le obligo a costa de su propia integridad a realizar trabajos de robo e intercambio de información para Raven. Había robado para ella desde hacía años y era bueno, pero parecía que en ese maldito libro de cuentas suyo nunca bajaba la cifra de lo que debía.
* Se lo que estás pensando mi pequeño Pelirrojo, ¿Cuándo esta hermosa mujer me mandara a una misión digna de mis habilidades? ¿Cuándo podre vestir ricas ropas y pavonearme como uno de los mejores ladrones de esta ciudad?- la mujer guardo el libro de cuentas y gesticulo imitándolo.- Quizás ha llegado el momento de darte algo más importante.
* ¿Estás hablando en serio? ¿Vas a darme un trabajo? ¿podre saldar mi deuda?- los ojos del semielfo se iluminaron por un instante.
-Uno de los buenos, pero no vas a ir precisamente solo, es algo demasiado importante como para que lo eches a perder, quiero que Liam te acompañe.- sonrío la mujer.
Hakom sonrió, Liam había sido uno de sus mejores amigos desde que había entrado al servicio de Raven, era todo un veterano y siempre había hecho las veces de hermano, aspiraba a llegar a ser tan bueno como él.
* Escúchame, esta misma noche me ha dicho un pajarito que se celebra una reunión en el palacio y es el momento idóneo para que consigáis una cosita para mí y la hermandad. Desde luego tu deuda sería saldada y serias libre pero en caso contrario no hace falta decirte que si surge algún problema negaremos conoceros. Y si os atrevéis a traicionarnos…creedme que deseareis estar ocultos en la tumba más profunda antes de que os ponga las manos encima.
* Por supuesto Raven….puedes confiar en nosotros! ¿Cuándo salimos? ¿Cuál es nuestro objetivo?
* ¿Qué te parece ahora? Todas las instrucciones se las he dado a tu amigo, así como las herramientas. Pégate a Liam como una sombra, puedes aprender mucho de el y haz que me sienta orgullosa. Además, eres uno de nuestros mejores informadores, ten bien abiertos ojos y oídos para que podamos usar esa pequeña ventaja si es posible, esa reunión parece importante.
Hakom salió de la habitación con una sonrisa, por primera vez las cosas le iban saliendo bien.
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